Gestión de riesgos para reducir la
contaminación por residuos sólidos en el parque “San Martín de Porres”
Introducción
Un desastre representa
la materialización del riesgo; es decir, de la posibilidad que se presenten
daños o pérdidas en el futuro. Por su parte, el riesgo depende de que exista un
peligro o amenaza y unas condiciones de vulnerabilidad o susceptibilidad. La amenaza
es el peligro latente que se encuentra en el parque San Martin de Porres ante
desastres en el futuro, resultado de la naturaleza y de la intervención del
hombre. La vulnerabilidad corresponde a la fragilidad o predisposición que
tiene la población y sus bienes a sufrir daños en caso de presentarse un
fenómeno peligroso como incendios urbanos, la quema de materiales tóxicos o
incluso terremotos o exposición a los rayos ultravioletas. De esta manera, los
habitantes de la zona y estudiantes del colegio vecino están expuestos a muchos
riesgos y a los peligros de estos y muchos más tipos de desastres.
Los vecinos del parque San Martin de Porres y estudiantes del
colegio vecino, no tienen conciencia de los peligros a los que están expuestos,
esto se puede reflejar al ver su falta de conciencia frente al medio ambiente
que los rodea, y ello nos hace ver que del mismo modo, frente a un desastre
natural, ellos no sabrían qué hacer para poder protegerse, por ello se
establece la pregunta, ¿Cómo puede ayudar la gestión de riesgos a la población
alrededor del parque San Martín de Porres?
Desarrollo
Para ayudar a los vecinos del parque “San Martin de Porres”, como
también a los alumnos de la I.E, a cuidar nuestro medio ambiente es necesario
enseñarles, acerca de la gestión de los riesgos lo cual es dividida en
tres partes según la ley 29664, la cual establece la gestión prospectiva,
correctiva y reactiva. Se ha detectado dos tipos de peligros tanto causados por
la naturaleza como por el hombre (antrópico). Debido a la mala edificación de
las casas con las que cuentan los vecinos del parque “San Martín de Porres”,
estos han construido sus casas inconscientemente, haciendo que tengan peligro
de derrumbe; además del peligro frente a las radiaciones ultravioleta que va
aumentando por el debilitamiento de la capa de ozono, causadas por muchos
factores entre los cuales se encuentra la contaminación de los cuales se tiene
la quema de residuos sólidos acumulados y los desechos de residuos peligrosos.
Con respecto a los sismos que la naturaleza puede provocar se debe
fomentar, a los vecinos y los alumnos, en tener en cuenta la importancia de los
diversos simulacros que se realizan a nivel nacional para que de una manera u
otra estar preparados ante una emergencia real a futuro, una gestión correctiva
sería edificar las bases importantes de cada casa para reducir el riesgo de
ante cualquier colapso de ciertas instalaciones. Y para la gestión reactiva
ante cualquier sismo evacuar de manera muy responsable manteniendo la calma; Y
el incremento de los rayos solares, una gestión prospectiva es fomentar la
utilización de bloqueadores solares para evitar la enfermedad de cáncer a la
piel, una gestión de reactiva es disminuir la contaminación para no debilitar
la capa de ozono. Una gestión reactiva es acudir a un centro hospitalario para
contrarrestar la enfermedad de cáncer a la piel.
Ahora con los peligros antrópicos se tiene a la quema de basura
acumulada (residuos sólidos), una gestión prospectiva sería ubicar puntos de
concentración de basura para que el recolector se haga cargo de esto. Una
gestión correctiva sería concientizar a los vecinos y alumnos mediante
charlas informativas con respecto a la importancia de mantener un ambiente
limpio y sano libre de cualquier tipo de contaminantes. Y una gestión reactiva
es brindarle seguridad a nuestro medio ambiente, en este caso al parque “San
Martín de Porres”; evitando que los vecinos irresponsables se deshagan de
materiales peligrosos en el parque, ya que muchas veces los desechan sin saber
que algunos materiales pueden ser dañinos para el aire, tierra, agua e incluso
aún más dañino para el ser humano; una gestión prospectiva es segregar los
residuos sólidos según su clasificación. Una gestión correctiva sería la
realización de campañas informativas para hacerles saber que tan peligroso es
desechar inadecuadamente residuos como el vidrio, cenizas, plomo (metales
pesados), desmonte, etc. Una gestión reactiva sería la llamada de atención o
denuncia hacia los culpables.
Conclusiones:
En conclusión, para adaptarse al cambio climático, se debe de
identificar las necesidades para la elaboración de un Plan de Gestión de
Riesgos para el parque de San Martín de Porres, y de esta manera reducir la exposición al riesgo e
incrementar su capacidad de resiliencia ante un desastre natural o antrópico.
Para ello, primero, se identificaron los peligros y se evaluaron los diversos
tipos de vulnerabilidad; de esta manera se determinó el nivel de riesgo al que
está expuesta la población. Segundo, se detallaron los factores que incrementan
la exposición al riesgo; y finalmente, se reconoció a la población presente en
el área de estudio y las relaciones de poder que se verifican en la zona
estudiada. Por ello se concluye con ayuda de la municipalidad, se concientice a
las personas e informen de las zonas más seguras en el parque así como también
las zonas seguras con las que cuentan los vecinos alrededor del mismo.
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